CaixaBank le asesora en la planificación y gestión de su jubilación
Con el lema ‘Presentes en tu futuro’, CaixaBank asesora a sus clientes en la planificación y gestión de su jubilación. La clave está en adelantarse y planificar el futuro para poder contar con los recursos suficientes que permitan mantener el nivel de vida tras la jubilación. Respecto a la jubilación, existen cuatro preguntas esenciales: ¿Cuánto necesito para complementar mi pensión de jubilación? ¿Qué capital quiero dejar a mis familiares? ¿Cómo voy a ahorrar? ¿Cuánto riesgo asumiré en mis inversiones?
CaixaBank ayuda a responder dichas preguntas y ofrece diferentes alternativas que se adaptan a las necesidades personales, teniendo en cuenta las diferentes etapas de la vida y otros aspectos financieros y fiscales. De hecho, CaixaBank lleva más de 100 años ayudando a sus clientes a preparar su jubilación. Hoy, más de 3 millones de personas confían sus ahorros en VidaCaixa, líder en previsión social complementaria de España. La pensión pública que se percibirá en la jubilación, en muy pocos casos, permitirá mantener el nivel de vida llevado en la etapa laboral, salvo que se disponga de un ahorro complementario. Si se contabilizan los ingresos de quienes han empezado a cobrar su prestación en 2012, la pensión bruta media de jubilación es de 1.271,50 €. Esta cifra anualizada es un 29.81% inferior al salario bruto medio de las personas con edades comprendidas entre los 55 y 64 años. Actualmente, para acceder al 100% de la pensión de jubilación, es necesario haber cotizado más de 35 años y jubilarse a partir de los 65 años, edad que irá elevándose hasta llegar a los 67 años. Además, se han introducido dos nuevos parámetros en el cálculo de las pensiones:
El índice de revalorización de las pensiones que, desde el 1 de enero de 2014, supone que las pensiones ya no se incrementan anualmente de forma automática en función del IPC, sino que se incrementan en función del nuevo índice de revalorización previsto en la Ley de Presupuestos Generales del Estado. Este incremento será como máximo la variación anual del IPC del año anterior +0.50%, y como mínimo el 0.25%.
El factor de sostenibilidad que, a partir del 1 de enero de 2019, supondrá una nueva forma de cálculo de la pensión teniendo en cuenta, entre otros factores, la evolución de la esperanza de vida de los pensionistas, tomando como referencia la edad de 67 años.
Debido a estos factores es complicado conocer con exactitud cuál será la pensión a cobrar. Por ello, empezar a ahorrar es la mejor fórmula para complementar la futura pensión de jubilación. Aun suponiendo que las cotizaciones de los últimos años permitan acceder a la pensión máxima de jubilación de la Seguridad Social, ésta puede ser inferior al último salario, pues la pensión máxima de jubilación son 35.763 euros.